Leo hoy en «La Voz de Galicia» que la Xunta retira el Plan Labora. Dicen que ha fracasado porque la mayor parte de los contratos se firmaban en el ámbito público.Sin duda era así, pero también tenía sus puntos fuertes.
Para la entidad pública contratante suponía en muchos casos mano de obra cualificada, con unas ganas enormes de trabajar y que se utilizaban en muchos casos para hacer esas cosas importantes pero no urgentes que nunca se hacen (se me ocurre aquello de ordenar y clasificar archivos municipales, hecho por especialistas).
Para los trabajadores, casi siempre la posibilidad de estabilizar durante al menos un año su situación personal, que no es poco según la situación en la que se esté, y la incorporación a su curriculum de una experiencia profesional, que aunque quizá no sea muy útil en la empresa privada, siempre es mejor que una «año en blanco» (sino que le pregunten a cualquiera que haya hecho selección de personal). También tiene la ventaja, no menos importante, de que la gente adscrita al plan se sienta activa y bien, ese ánimo, sin duda, les ayuda a encontrar trabajo.
En fin, claro que hay que mejorar lo que hay pero eso de quitar antes de tener un nuevo planteamiento, pues no, no me parece bien.