Vida de Pareja

| |

Periquitos

Yo habia llegado hace poco de viaje y observé la pequeña jaula en una esquina del patio trasero de la casa de mi padre, en penumbras, con una pareja de periquitos encerrados dentro. Despertaban una sensacion de tristeza, no habia alegría, vivían en penumbras, olvidados por la rutina doméstica. Eran una pareja triste, no habían procreado, aunque parecía que lo intentaban. Ella, al menos, lo intentaba una y otra vez: se pasaba horas y horas en el nido, tratando de darles vida a lo que sabiamos eran pequeños huevos que se acumulaban uno tras otro.

Entusiasmé a la familia, hasta que un dia salimos hacia el mercado con la idea de comprar una nueva jaula para la pareja. Después de mucho buscar encontramos una jaula maravillosa, muy espaciosa, tan grande, que mi hermana sugirió comprar una pareja mas de periquitos para que acompañaran a nuestra pareja actual. Con mucho entusiasmo vimos como el vendedor equipaba la jaula con las últimas novedades decorativas y nos fuimos a casa.

Mi hermana, algo más acostumbrada, metió la mano a la antigua jaula y atrapó uno a uno a nuestros antiguos periquitos para trasladarlos a su nueva casa. Una vez que ellos estuvieron dentro soltó a la nueva parejita que les habíamos traido de compañía.

Nuestro antiguo periquito y el nuevo periquito comenzaron a acercarse, a encresparse, a demostrar que estaban en condiciones de pelear para demostrar quien sería el nuevo jefe de la tribu. Nosotros observabámos con preocupación desde el exterior que no surgiera una pelea dura entre los dos. De pronto nuestro antiguo periquito, aparentemente muy macho, opto por tomar una posicion debajo de su contrincante, el cual no desperdició la oportunidad… para hacerle el amor apasionadamente en cuestión de segundos.

La cara de sorpresa y confusión entre todos los miembros de la familia que estabamos observándolos con la idea de crear una familia feliz formada por dos parejitas rozaba el estupor.

Ante la incredulidad y risas de todos, el proceso se repitió en pocos minutos varias veces, nuestro periquito estaba siendo follado -literalmente- por el nuevo periquito.

Nuestra periquita y la nueva periquita, tal vez no daban crédito a lo que veian, pero estaba sucediendo alli, delante de ellas sin que nadie hiciera nada. Nuestra antigua periquita, digna de ella misma, se apartó y observaba desde lejos. La nueva periquita parecía no enterarse de lo que pasaba.

Lo que sucedía era que en realidad la pareja original de periquitos eran dos periquitas. Ante la sorpresa general de descubrir que nuestro antiguo periquito en realidad tambien era periquita optamos por retirar a la nueva periquita y reemplazarla por un periquito.

Mi íntención era traer felicidad a un hogar, el resultado hasta hoy es incierto.

Esta entrada fue escrita para este blog por Jorge el 14 de marzo del 2006.

Jorge ha fallecido el 1 de julio.  Pero su tremenda humanidad y bondad estará para siempre con nosotros. Te echaremos de menos.

Marcos, todo mi cariño y un gran abrazo. Sabes cuánto me gustaría poder estar contigo. No te apartas de mi pensamiento.

1, 'include' => $prevPost->ID, 'post_type' => $post_type, ); $prevPost = get_posts($args); foreach ($prevPost as $post) { setup_postdata($post); ?>

1, 'include' => $nextPost->ID, 'post_type' => $post_type, ); $nextPost = get_posts($args); foreach ( $nextPost as $post ) { setup_postdata($post); ?>

2 comentarios en «Vida de Pareja»

  1. Recuerdo el relato de los periquitos ¡cómo nos había gustado!, no recordaba que era de Jorge a quién no tuve el gusto de conocer. Es un lindo homenaje que lo hayas vuelto a subir para volver a leerlo.
    Un fuerte abrazo querido Marcos.

    Responder

Deja un comentario