Érase una vez….

Unos amigos metidos a blogeros.

Y de esto hace un año. Sí, estamos de cumple nosotros también. Marcos me «reñía» ayer por no borrar los primeros post con comentarios entre nosotros. No he querido hacerlo porque creo que son parte de esto. Empezamos como una pruebita que se quedó y que, con vuestra ayuda y vuestras visitas, seguirá adelante.

Dicen que tenemos ahora mismo 290 entradas -si no hubiera flojeado este verano sería casi una diaria- y, ahora mismo, 1485 comentarios. Agradezco cada uno de esos comentarios que siempre han sido educados y amables y , como no, las colaboraciones que nos habéis enviado. Estamos alrededor del 200.000 blog del mundo de 50.000.000 de blogs, según Technorati.¡No está mal para un grupo de locos subidos a un árbol!.

Haré lo típico: daros las gracias (muchas veces) en mi nombre y en el de Marcos. Pues claro que sí, nos alegramos mucho de veros por aquí y echamos de menos a algunos de nuestros bloggeros favoritos que han dejado de escribir (espero que temporalmente, por eso sigo conservando vuestros enlaces).

Hemos hecho un «rediseño» de aspecto en este año y ahora pienso que quizá necesitamos un «rediseño» de contenidos. En cualquier caso, espero que este siga siendo uno de vuestros «cafés» favoritos a los que venir a charlar.

Y como no podía ser menos, nos dedicaré, a todos, a vosotros y a nosotros uno de mis poemas favoritos:

¿Cómo poder retener mi alma para que no roce
la tuya? ¿Cómo poder elevarla
por encima de ti hacia las otras cosas?

Es el principio de la Canción de Amor, de R.M. Rilke.

Muchas gracias por estar ahí.

Anotacion de Marcos:

Tengo por norma no editar los mensajes de Amalia. Esto de debe a una razón muy sencilla: este blog es el blog de Amalia. No es -no os equivoqueis al respecto- el blog «de Amalia y Marcos». Hoy hago la excepción para añadir esta nota.
Sucede que hace casualmente un año ella me preguntó si podía ayudarle -técnicamente- a poner un blog. Yo le sugerí ponerlo y que fuera probando. ¡Era solo una prueba!

Vale, una prueba. Al principio, ella ponía un post y yo le respondía con otro o le contestaba en comentarios para que ella fuera viendo como funcionaba la cosa.

En fin, resulta que al final le gustó tanto que siguió escribiendo como si fuera *EL* blog, no un blog de prueba.

Siguió escribiendo y escribiendo y vosotros poniendo comentarios y escribiendo y hasta yo poniendo posts de vez en cuando…

No me puedo creer las cifras que leo: ¡1480 comentarios!

Es una lianta y nada mas que una lianta.

Por otro lado, es mi amiga y la quiero, y a vosotros, todos y cada uno de los que habeis comentado en el blog de Amalia, también.

Bienvenidos, como siempre, y gracias. Vosotros también sois EL OLIVO.