Alguien que sabe porqué le he puesto El olivo al blog me ha escrito diciendo que le había emocionado. Me pregunta si el de la foto es mi árbol. No lo es, aunque casi casi es igual. Con cuatro ramas fuertes. El mío es un poquito más grueso (tiene 200 años).
Durante un tiempo estuve buscando nombre al blog y no encontraba ninguno que lo significase todo. Y de repente, como a darwin con su manzana, lo encontré. Fue fácil: estaba enferma un día de verano precioso, fastidiada porque me estaba perdiendo una comida- merienda- cena- madrugada en casa de unos amigos queridos. No tenía la cabeza como para leer. Aburrida, levanté la vista y vi mi olivo frente a la ventana de mi dormitorio.
Y recordé cómo había llegado a mi. El regalo más hermoso que me habían hecho nunca, aunque no fue el único. Absolutamente todo fue precioso. Algún día novelaré esa historia, o la contaré, simplemente. Es difícil sentirse más querida. Hasta a uno de mis libros favoritos recurrieron (Señora de rojo sobre fondo gris de Delibes).
Creo que todos ellos, los que fueron y los que no pudieron, saben cuánto agradecí el mimo, el detalle que pusieron en todo. Por eso es El olivo, porque significa amistad, unión, amor.Es un espíritu, una forma de entender las cosas.
Un millón de gracias. Siempre me acompañará.
Lo dicho: novela la historia y además cuéntala.
Gracias Amalia.
Misterios de la informática. Nadie dijo nunca que fuera una ciencia exacta.
Puede ser simplemente que el blog sepa idiomas y que no funcionara porque Verme no es otra cosa que la traducción al suevo de toda la vida de una palabreja a la que los informáticos le tienen especial mania: worn.
Gracias a tí por dejarnos conocerte, bueno…..o eso creemos.
Para mi el de la manzana fue Newton; dice la leyenda: que estando en su huerto debajo de un manzano le cayo la susodicha, parece ser que le dió en la cabeza, y de ahí el desajuste que le llevó este hombre a buscar la diferencia entre lo que va y lo que viene. De todas formas, yo para reflexionar también prefiero una oliva, por su falta de peso.
Jajaja, tienes razón, claro, fue Newton. Tú siempre tan puntilloso y estamos de acuerdo: yo también prefiero una oliva.
Habiendome criado en Jaén, he plantado unos cuantos, regado, podado, curado … por eso, para mi también es un árbol especial.
Aunque algunas veces, trabajando de sol a sol, les hubiera metido fuego de buena gana ja ja ja
Ya lo decía Lorca:
«Del olivo
me retiro,
del esparto
yo me aparto,
del sarmiento
me arrepiento
de haberte querido tanto.»
🙂
Uno nunca debe arrepentirse de eso. hay cosas mejores de las que hacerlo. 🙂